09-07-04
Como en el día de ayer, la noche ha sido tranquila. Nuevamente el día amanece nublado , se agradece , la etapa de hoy es dura y larga ,casi 28 kilómetros , en constante ascenso, en un principio suave, aunque lo peor está en los diez últimos kilómetros que se asciende desde los 600 a los 1300 metros de altitud en O Cebreiro.
El desayuno de hoy se me antoja que debo hacerlo fuerte , aunque mas tarde aprovechando las diferentes paradas, tomaré algunas frutas que seguro encontraré por los diferentes pueblos y aldeas.
Dejo atrás la puerta del perdón en la solitaria iglesia de Santiago y me dirijo hacia la salida de este hermoso pueblo de la comarca de El Bierzo, rico y singular, diferente al resto de León , con un microclima más benévolo que lo caracteriza ; para entrar en el valle de Valcarce estoy cruzando el puente sobre el río Burbia, bordeando el túnel de la N-VI , se continua recto por la carretera por el andadero habilitado para ello. Apenas hay tráfico gracias a la moderna autovía del noroeste , una valla de hormigón separa el arcén de la vieja carretera.
Pereje , estoy a casi cinco kilómetros de mi salida , el avance ha sido rápido y seguro por ese improvisado andadero de peregrinos prefabricado. El paso sigue por la estrecha calle mayor y única de esta aldea, que abandona momentáneamente la carretera, y se retoma a la salida tras una zona de descanso con mesas , bancos y fuente. El Camino sigue ascendiendo suavemente , Galicia espera allá arriba.
A 2700 metros de Pereje, un mojón en un cruce y un camino a la derecha, es aconsejable dejar la antigua carretera nacional en dirección a Trabadelo , merece la pena el desvío sólo por caminar entre las enormes castañedas que flanquean la entrada al pueblo. Frente al ayuntamiento , en una casa del pueblo rehabilitada se encuentra el refugio ( 987566413 ) . Tras cruzarlo continuo por la vieja carretera nacional hasta enlazar de nuevo con la N-VI .
Grandes puentes de hormigón hacen que la nueva autovía nos valla zigzagueando por encima . El paisaje se torna cada vez mas húmedo , hora aumenta el arbolado, hora vuelve a asomar el hormigón. Entre el arbolado y el hormigón , una zona de descanso invita a reponer fuerzas tras dos horas de Camino recorrido.
Esta vez hacia la izquierda, dejo de nuevo la carretera para pasar por el núcleo urbano de La Portela . Su fuente de piedra es un buen sitio para reponer la cantimplora . No hay mas que restaurantes y gasolinera en la carretera. Pronto se llega a la sombra de los castaños antes de llegar a
poco mas de un kilometro al pueblo de Ambasmestas , “aguas juntas” el nombre se debe a la unión en este punto de los ríos Balboa y Valcarce. Una calle lo cruza, donde en una panadería-quesería se vende queso de cabra artesano y un puesto con bastones y demás utillería santiaguera artesanal.
El valle se torna mas frondoso y el trino de los pájaros alegra el día , el ruido del tráfico disminuye considerablemente.
Los pueblos se suceden cercanos unos de otros entre uno y dos kilómetros. Pronto se iniciará la subida al Cebreiro.
16´3 kilómetros , cerca de cuatro horas de camino y todavía me queda lo peor de la subida. Hoy el día lo estoy haciendo solo. No sé por qué pero me siento algo decaído y sin ganas de caminar junto a nadie. No pienso en nada en concreto, pero...
Algunos peregrinos se quedan en este pueblo, Vega de Valcarce , el más grande del valle, para mañana temprano afrontar las cuestas que nos separa de Galicia. Aunque administrativamente depende de León, la vida en estos pagos ya está íntimamente relacionada con Galicia.
En las antiguas escuelas, que se encuentra en el centro del pueblo subiendo una cuesta, a mano derecha está el albergue municipal ( 625989737 ). También está el Albergue de Sarracín ( 987543045) nada más entrar al pueblo, privado, muy completo y acogedor, con bar comedor y chimenea.
A poco más de dos kilómetros los bosques de castaños cubren las laderas. Un minúsculo pueblo aparece entre ellos, Ruitelán , tras atravesarlo , paso por un puente de origen romano y a poco menos de un kilómetro Las Herrerías, pronto empezará la verdadera subida. El primer kilómetro se continua por asfalto. Después las flechas amarillas me indican que hacia la izquierda es la ruta correcta.
Los caminos tradicionales que sirven para mover el ganado hacia los pastos son-las corredoiras-, aquí empieza la verdadera subida , las rodillas y tobillos se empiezan a resentir , las piedras en el camino me hacen tambalear hacia los lados haciendo mas difícil el ascenso. El espeso techo de arbolado me impide ver el cielo, me arropa ante la escarcha , la humedad es creciente , me falta el aire , sudo , estoy mojado, no sé … pero esta media hora de duro ascenso se me torna interminable, tras torcer en una bifurcación hacia la derecha, se bordea por un grupo de caseríos
La Faba, tradicionalmente ganadero , empiezan las primeras vacas gallegas.” El último rincón de El Bierzo” es el nombre del Bar del pueblo. Verdaderamente es casi el último, pero aun quedará Laguna de Castilla. Algunos hórreos-palloza de madera, con base cuadrada y techo de paja nos dan pista de que todavía estamos en León, ciertamente es el último pueblo, pronto llegaré , pasaré por el límite provincial. Menos de tres kilómetros me separan del fin de esta etapa que se me está haciendo larga, aunque el cambio del paisaje recompensa la fatiga del día. La pendiente se acaba , la corredoira afronta el último repecho . Al fondo se puede divisar el Irago y los montes de León.
Un mojón kilométrico en el que figura el guarismo 152´5, son los kilómetros que faltan para Santiago. Estoy en el límite de la provincia, acabo de llegar a Galicia. De un lado ,León, del otro, Lugo. Ahora cada quinientos metros me encontraré con uno de estos mojones.
O Cebreiro ; acabo de llegar al ” Pórtico de Galícia “ , la magia gallega comienza en este poblado de piedra .Las pallozas envueltas por la neblina que lo inunda todo dando le todavía más si cabe un paisaje misterioso de húmeda oscuridad.
Junto a la entrada puede verse el monumento a Elías Valiña , párroco de O Cebreiro enterrado aquí en 1989 . Nos acoge en un principio la sencilla iglesia de estilo prerrománico de ábsides rectangulares , donde venden credenciales para los peregrinos que empiezan aquí su ruta, junta a esta una casona también de piedra ahora habilitada como hotel.
Paso junto a las pallozas , la niebla se ha alejado dejando libre a la vista de este peregrino estas maravillas de construcción ,aunque cansado no puedo mas que parar y admirarlas , los tobillos me duelen , tengo que llegar al albergue que está a la salida del pueblo en un enorme caserón ,
los albergues que la Xunta tiene a lo largo de todo el tramo gallego hablen a partir de las 13 horas por lo que cuando llego antes de hora deposito la mochila en el suelo formando cola tras la de los demás peregrinos para luego poder inscribirme en el orden de llegada. En la cima de un prado verde junto al albergue, el ejercito ha habilitado tiendas de campaña para los peregrinos que no encuentren cama en el albergue. Las vistas desde aquí llegan hasta donde la niebla lo permite, nos envuelve un paisaje de colinas verdes y suaves. Galicia me ha recibido desde el filo del cielo.
“ Dios ayuda y Santiago “
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